Maria Cervantes heredó de su padre su estilo pianístico y, como pocos, conocía la interpretación de sus danzas. Nacida en La Habana, el 30 de noviembre de 1885, María comenzó los estudios de piano con su padre, quien por cierto, la llamaba Chanchín por tener ella las orejas pequeñas. Desde muy niña María se sintió artista. El baile le entusiasmaba. Su padre empezaba con una danza, pasaba para una mazurca, y seguía con un danzón, mientras ella marcaba el ritmo como una verdadera profesional, y eso que para entonces apenas tenía tres años. A la muerte de su progenitor, en 1905, ella se hunde en una profunda tristeza que la separa de la música, mas al tocar el piano el primer día, termina una romanza sin palabras que él le había dedicado a ella, y ya enfermo, no pudo acabar. A los 13 años realizó su primera presentación pública en el Teatro Tacón (hoy Gran Teatro de La Habana); pero su debut profesional se efectuó en el teatro Campoamor en 1929, año en que también graba sus primeros discos en los Estados Unidos., para la firma Columbia. Actúa también en la RCH Cadena Azul, en la Cuban Telephone Company, en Radio Salas y en el hotel Sevilla, donde se presenta junto al pianista Felo Bergaza. En la emisora Mil Diez trabaja con los compositores y directores de orquesta Adolfo Guzmán y Enrique González Mántici. El éxito la acompaña. Viaja otra vez a los estados Unidos., donde graba para la Columbia y actúa en el cabaret del famoso actor y cantante argentino José Bohr. Al regresar a La Habana su nombre aparece en las carteleras de los más importantes escenarios, junto a figuras de la talla de Rita Montaner y Bola de Nieve. Por años, su simpatía personal, su auténtica cubanía y aquel carisma tan especial para interpretar sus canciones, la hicieron ganar la admiración y el cariño del público. Al fallecer su esposo, abandona la escena, pero en 1960, persuadida por el musicólogo Odilio Urfé, reaparece en un concierto abarrotado de público en el Museo Nacional de Bellas Artes, y continuó sus presentaciones artísticas hasta su fallecimiento en La Habana, el 8 de febrero de 1981.