Radio Cadena Agramonte emisiora de Camagüey
Por Fidel A. Manzanares Fernández/ Radio Cadena Agramonte.
En medio de disímiles inconvenientes de la cotidianidad, la dinámica social y la lucha por alcanzar la felicidad, un problema que preocupa sobremanera asoma en este periodo del año, previo a la temporada de primavera.
El más reciente incendio en la franja noreste de la provincia de Camagüey, la más extensa y llana del archipiélago, me dejó una nota preocupante en el buzón.
En días previos también había sido testigo de otro siniestro cercano a un fábrica repleta de material volátil, aunque no con igual trascendencia que el desastre acontecido del 7 al 15 de marzo.
Ambos hechos exhiben un factor común: la negligencia de las personas, irresponsables de cuánto podrían perjudicar con semejantes actitudes.
La dirección del Cuerpo de Guardabosques de esta provincia informó la quema de 8 mil 232 hectáreas en áreas colindantes a los bosques de plantación. Una barbaridad cuya culpa cayó en saco roto, mientras los perjudicados fuimos todos.
Cada especie en cualquier porción de estos bosques no solo tiene derecho a la existencia, sino que además forman parte de una cadena ecológica imprescindible en la naturaleza.
No podemos darnos el lujo de circular con vehículos sin mata chispas, prender una fogata donde se nos plazca, o fumar y arrojar los cigarros encendidos como si fuésemos entes aislados sin conocimiento de causa.
Urge un llamado a nuestra conciencia. ¿Cuánto benefician los árboles y el suelo, al equilibrio de la vida?
Las campañas por preservar la flora y la fauna se suceden en varios spot de diferentes medios de comunicación y en grupos de protección de ecosistemas, mas no basta si no se toman medidas drásticas con quienes talan los árboles o destruyen el hábitat de una cueva.
Preservar el medio ambiente es misión de cada homo sapiens, entonces empecemos por cuidar nuestros bosques.
