EE.UU, 10 jun.- Este lunes entraron en vigor las nuevas restricciones de entrada a Estados Unidos anunciadas por el presidente Donald Trump. La medida, publicada el pasado miércoles mediante una proclamación presidencial, representa un significativo endurecimiento de las políticas migratorias del país norteamericano.
La disposición prohíbe completamente la entrada a ciudadanos de doce naciones: Afganistán, Birmania, Chad, República de Congo, Guinea Ecuatorial, Eritrea, Haití, Irán, Libia, Somalia, Sudán y Yemen. Además, establece limitaciones adicionales para visitantes de otros siete países: Burundi, Cuba, Laos, Sierra Leona, Togo, Turkmenistán y Venezuela.
Sin embargo, la normativa incluye importantes excepciones para residentes permanentes legales, titulares de visados vigentes, ciertas categorías de visados y aquellos cuya entrada se considere que beneficia los “intereses nacionales de Estados Unidos”.
Trump defendió la medida argumentando motivos de seguridad nacional, mencionando específicamente un atentado ocurrido en Boulder, Colorado, cuyo autor tenía un visado de turista vencido. El mandatario advirtió que ambas listas podrían modificarse “a medida que surjan amenazas en todo el mundo”.
La decisión ha generado fuertes críticas internacionales. Cuba, Venezuela e Irán han condenado enérgicamente la medida, calificándola de tener un “trasfondo racista”. Teherán prometió tomar “todas las medidas necesarias” para proteger a sus ciudadanos, mientras que Chad respondió suspendiendo la emisión de visados para ciudadanos estadounidenses. (Texto y Foto: Cubadebate)