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Radio Cadena Agramonte emisiora de Camagüey

Fuerzas Armadas Revolucionaria, Cuba, Revolución

Un solo Ejército


La Habana, 2 dic.- No por gusto Fidel lo dijo una vez, Cuba solo ha tenido una Revolución. Con el repique de las campanas en el ingenio Demajagua, hace 157 años, la Patria bendecía a sus mejores hijos, los blancos y los negros, que en toque de ¡A degüello! comenzaron a parir la libertad que nos bajó de la Sierra, casi un siglo después, de manos barbudas. 

Todo país tiene derecho a defenderse. Por eso, a caballo y en la manigua nació el Ejército que verdaderamente defendía a Cuba (no aquel que venido del viejo continente lo ultrajaba y sometía). Entonces, su primera misión fue que el mundo reconociera a los cubanos su soberana potestad de hacerse valer sin servidumbres y patronatos.

¡Bien alto que se hicieron sentir los mache tes en su tribuna! Y no fue por azar que en los montes, donde no hay campaña de verano que pueda poner coto a la dignidad, crecieran nuestras huestes guerreras. El padre Varela lo había vaticinado, en cuestiones de soberanía las armas son el ún co camino de la victoria.

Por eso volvieron a resurgir las fuerzas, esta vez con sangre mambisa en las venas, y desde el Oriente fecundo la Maestra vio crecer al más rebelde de todos los Ejércitos. Quien haya puesto a prueba su cuerpo montaña arriba hasta Martí entenderá la locura que era ganar una guerra con cinco fusiles y siete hombres; pero eran hombres con un propósito y una promesa hecha: mártires o héroes.

En 1959 la victoria fue de los jura mentados, de los campesinos que sin saber leer sabían amar su tierra, los estudiantes que conocían el valor y el poder de una Universidad, de los que siguieron la luz que los llevó al Moncada, a Tuxpan, a la caravana invicta… de las madres que entregaron su corazón como soldado.

Con la efervescencia del triunfo nadie perdió el derrotero, un país no se defiende un día sino todos los días; ahora tenía que ser el ejército de la refundación, de la construcción de una nación verdadera con todos y para el bien de todos. El enemigo ya no venía del otro lado del planeta, desde el frente mostraba con saña las garras, la alerta era el estado natural.

Esta vez, la orden era para todos los cubanos, cada quien tenía una po sición para defender: los hombres a las trincheras, las mujeres a las fábricas… nacía un ejército.

Usted puede verlo caminar por las calles. Ahora es el joven que estudia, o el que desde el surco fomenta la economía, puede verlo en el buque, de raso blanco uniforme, o en la Mariana de límpido verde olivo, en quienes los domingos de preparación popular amanecen antes que el alba, en los que desde el cielo custodian el sueño nacional… está en los que en secretas o públicas tareas han probado la valía del internacionalismo, en los niños que ofrendaron sus vidas en Girón, en los que a fuerza de ejemplo ganan grados en los ejércitos Oriental, Central y Occidental. Todos ellos son nuestras Fuerzas Armadas Revolucionarias, la que cumple 65 años, la que tiene 157 y a pura intransigencia sigue ganando batallas diarias; porque en Cuba hay una sola Revolución con un solo Ejército, su pueblo. (Texto: Carmen Luisa Hernández Loredo/ colaboradora Radio Cadena Agramonte) ( Foto: Internet)


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