Roma, 13 feb.- El embajador de Cuba en Italia, José Carlos Rodríguez, denunció aquí la persistencia de medidas coercitivas unilaterales de Estados Unidos contra países en desarrollo.
El representante permanente de Cuba ante los organismos internacionales con sede en Roma, intervino este miércoles en la segunda jornada del 43º periodo de sesiones del Consejo de Gobernadores del Fondo Internacional para el Desarrollo Agrícola (FIDA), con sede en esta capital.
El diplomático de la nación caribeña se refirió específicamente al bloqueo económico, comercial y financiero que el Gobierno estadounidense intensifica contra su país y otras naciones de la región.
Rodríguez argumentó que los obstáculos impuestos por Washington “entorpecen de manera significativa” los esfuerzos dirigidos a cumplir los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas.
El embajador participó en el debate sobre “Invertir en sistemas alimentarios sostenibles para poner fin al hambre para 2030”, tema que durante dos días acaparó la atención de los representantes de los gobiernos miembros del organismo financiero de ONU enfocado en el desarrollo agrícola.
También denunció el derroche de recursos en gastos militares y el incumplimiento de la mayoría de los países desarrollados con los compromisos relativos a las ayudas oficiales al desarrollo, mientras el hambre crece en el mundo.
Tras ponderar la importante labor del FIDA para erradicar la pobreza rural en el planeta, en medio de limitaciones financieras, el representante cubano explicó que en 2018 la Ayuda Oficial al Desarrollo disminuyó un 2,7 % en términos reales, equivalente el 0,31 % del Producto Interno Bruto (PIB) de los países industrializados.
Sólo cinco estados donantes, dijo, alcanzaron o sobrepasaron el compromiso de dedicar el 0,7 % de su PIB a ese propósito.
Mientras, acotó, “se dilapidan cuantiosos recursos para gastos militares”, los cuales crecieron en el mundo, durante 2018, por quinto año consecutivo, hasta alcanzar la cifra de 1,78 billones de dólares, superando el récord establecido en 2010.
La posición de Cuba coincidió con la expuesta poco después por la Comisionada para la Economía Rural y la Agricultura de la Unión Africana, embajadora Josefa Scko, quien, en otra contundente intervención, llamó a todos a “silenciar las armas” para poner fin al hambre y la pobreza.
Más adelante, Rodríguez señaló la necesidad de “acciones multilaterales decididas para hacer frente a los riesgos mundiales y cumplir la Agenda 2030, incluida la lucha contra el cambio climático”.
Todos los gobiernos, apuntó, deberían reafirmar su compromiso con la Agenda de Acción de Addis Abeba, resultante de la Tercera Conferencia Internacional sobre la Financiación para el Desarrollo.
Esa agenda, argumentó, proporciona un marco global para financiar el desarrollo sostenible y reforzar la acción colectiva para hacer frente a los desafíos mundiales.
Además, el diplomático apoyó el reforzamiento del FIDA y los recursos a su disposición, para ejercer con mayor alcance su mandato de contribuir a eliminar la pobreza y el hambre para 2030.
Al final de su intervención el representante permanente de Cuba ante los organismos internacionales en Roma, agradeció al FIDA la cooperación con su país y valoró que los tres proyectos de cooperación actualmente en ejecución en la isla “demuestran ejemplar y eficientes resultados”. (Texto y foto: PL)