La Constitución de Guáimaro fue la primera de la República en Armas, y constituyó la expresión de la voluntad del movimiento independentista cubano, y de la organización política que se dieron los libertadores de 1868.
El historiador Julio Le Riverend señala que el gran mensaje de la Asamblea de Guáimaro no es solamente el de la unidad y la organización.
''Es además el mensaje que, como decía Martí, un pueblo cuando se lanza a la revolución tiene que saber tras de qué va y qué le ha de venir después''.
Retomando a Martí en su escrito de ''Patria'': esa primera Constitución ''es un código donde puede haber una forma que sobre, pero donde no hay una libertad que falte''.