río Hatibonico, arroyo Juan del Toro, cacique Camagüebax, Casino Campestre, Camagüey

Casino Campestre de Camagüey: testimonio y homenaje de la ciudad


Por: Yurislenia Pardo Ortega/Radio Cadena Agramonte

La sombra refrescante de los árboles, el arrullo de las aguas y la fertilidad de los suelos entre el río Hatibonico y el arroyo Juan del Toro, tal vez fueron atractivos que cautivaron al cacique Camagüebax y lo hicieron asentarse con su tribu en estas inmediaciones.

+ Fotos en Facebook

No es solo leyenda que por estos lares habitaran nuestros antepasados. Según afirma el destacado periodista Eduardo Labrada Rodríguez, excavaciones realizadas en el sitio aseveran la existencia de un grupo aborigen en el área que, a partir de la segunda mitad del siglo XIX, se convertiría en el parque Casino Campestre.

El Casino o parque “Gonzalo de Quesada”, como fuera nombrado en 1916, y cuyo cambio la tradición popular no asimiló, mantiene desde la época en que fuera extensión de las ferias de La Caridad, los atractivos que lo hacen distinguirse, no solo como el parque urbano más grande del país, con un área de 131 mil 500 metros cuadrados, sino por sus valores históricos, culturales, naturales y escultóricos.

Este pulmón natural de la urbe constituye un sui generis  testimonio viviente de los momentos y personalidades imprescindibles en la existencia de la antigua Villa de Santa María del Puerto del Príncipe.

Al pasear por él se puede encontrar, desde la majestuosa ceiba sembrada el 20 de mayo de 1902, y primer monumento a La República Neocolonial  erigido en el país, pasando por el que recuerda al Libertador Desconocido y que guarda bajo sus mármoles tierra de los potreros de Jimaguayú y los despojos de un mambí que cayó en la Guerra del 95 (1929), hasta el sencillo homenaje al destacado biólogo y ecologista Jorge Ramón Cuevas, colocado en el 2006.

Realzan la hidalguía de esta porción de suelo agramontino dos construcciones de obligada visita para lugareños y foráneos: la gruta (1924) y la Glorieta (1905), réplica, esta última, de una construcción que existe en Sevilla, España.

Como complemento de la magia que envuelve al Casino, cómplice de travesuras infantiles, domingos de descanso y amores furtivos, está el palomar con forma de farol chino, construcción que para algunos no sobrepasa el valor utilitario, pero que constituye el único monumento en Cuba a los jóvenes alfabetizadores, que hicieron posible declarar a la Isla, el 22 de diciembre de 1961, primer territorio libre de analfabetismo en América Latina.

Muchas otras historias, contadas o por contar, guardan sus árboles, piedras y bancos, los que orgullosos han visto reanimar en los últimos tiempos cada porción de esta joya camagüeyana,  la que también saludará orgullosa, el próximo 2 de febrero, el aniversario 500 de la fundación de Santa María del Puerto del Príncipe.

Algunos de sus tesoros.

Monumentos

Otras obras

  • Ceiba de la Libertad (1902).
  • Glorieta (1905).
  • Gruta (1924).
  • Árbol de la Amistad (1997).
  • Parque de arena.
  • Zoológico
  • La Ciudad Deportiva


En esta categoría

Comentarios


Tu dirección de correo no será publicada *