Qué susto cuando quedó al descubierto aquel jovencito encaramado en la onda aérea. Ubiquémonos: Teatro Principal, Circo Areíto, comienzo de la obra “3, 2, 1… ¡Despegue!” Desde el primer número, la compañía volaba por encima de las expectativas, y eso puede ser tan peligroso como caminar sobre una hoja afilada.
La adrenalina cogía los efectos reforzados en vivo por el músico Yosbel. Por la rapidez en la percusión sospeché y confirmé que lo buscaron también Veloz en el apellido. De nuevo tuve los pelos de punta con otro debut. ¿Recuerdan el tema “Entre la rumba y el son”, donde se goza y se canta con Rumbatá y Adalberto el “Deja que se bote el agua del tinajón…”? Con esa soltura de fondo Alejandro paseaba el equilibrio sobre taburetes. Él y Yonatan recibieron las clases de Lisbey (malabarista y director general de Areíto) y Félix, veterano de la onda aérea de nuestro Circo. El Circo Areíto ha vuelto a despegar. Enhorabuena. (Texto: Adelante Digital. Fotos: Humberto Cid/Radio Cadena Agramonte)