Radio Cadena Agramonte emisiora de Camagüey
La Habana, 16 jun.- En Cuba, la industria tabacalera muestra signos de recuperación en la presente campaña 2024-2025 con 15 000 hectáreas sembradas a nivel nacional, de las cuales 10 378 corresponden a Pinar del Río, provincia que aporta el 65% de la producción agrícola del país.
Los datos reflejan la gradual reactivación del sector tras los severos daños causados por el huracán Ian, según confirmó Marino Murillo Jorge, presidente del Grupo Empresarial Tabacuba.
Durante un recorrido por las áreas de cultivo, Murillo Jorge enfatizó la necesidad de monitorear rigurosamente los indicadores de rendimiento, destacando que mientras la capa de los habanos puede obtenerse de otras regiones, la tripa y el capote deben elaborarse exclusivamente con hojas cosechadas en las prestigiosas vegas pinareñas de primera calidad.
El directivo valoró positivamente el desarrollo vegetativo de las plantaciones y reconoció el esfuerzo extraordinario de los vegueros, quienes enfrentan la crisis energética realizando riegos incluso en horarios nocturnos, dado que el 50% de los sistemas de irrigación dependen de electricidad.
El sector mantiene ambiciosos compromisos productivos para la presente temporada, incluyendo la fabricación de 80 millones de tabacos en fábrica y la entrega de 70 millones para exportación, reportó el periódico Guerrillero.
Murillo Jorge reveló que cuentan con un esquema de financiamiento consolidado que contribuye con 100 millones de dólares a la liquidez del Estado. Entre las prioridades inmediatas mencionó garantizar materia prima para la industria cigarrera, resolver el desabastecimiento en redes comerciales y reducir los elevados precios en el mercado informal.
Para la próxima campaña, Pinar del Río deberá incrementar sus áreas de cultivo hasta 20 000 hectáreas, meta que requiere completar urgentemente la construcción de 3 000 casas de cura pendientes.
“Los campesinos no siembran si no tienen seguridad de contar con ellas”, explicó el directivo.
Actualmente, el sector dispone de reservas de capa para cubrir año y medio de producción, aunque el objetivo ideal sería mantener inventarios equivalentes para toda la materia prima y habanos terminados, como protección ante eventuales desastres naturales. (Texto y Foto: Cubadebate)
