La Habana, 9 oct.- Más de 100 mil capitalinos, en representación del pueblo cubano, exigieron hoy el cese del genocidio israelí en Palestina durante una multitudinaria concentración en la Tribuna Antiimperialista José Martí, encabezada por el presidente Miguel Díaz-Canel.
El acto contó además con la presencia de altos funcionarios del gobierno cubano, el encargado de negocios de la Embajada de Palestina en La Habana, Majed Abu Al Hawa, jóvenes palestinos que estudian en universidades de la isla caribeña y representantes de organizaciones de la sociedad civil cubana.
Desde el escenario ubicado frente a la Embajada de Estados Unidos, oradores denunciaron la brutal ofensiva israelí, mientras se proyectaban testimonios audiovisuales de integrantes de las flotillas por la libertad de Palestina —participantes en la Global Summit— asaltados y secuestrados en alta mar por el ejército israelí mientras intentaban llevar ayuda humanitaria a Gaza.
Un trío de estudiantes palestinos expresó, mediante cantos y poesía, su indignación por la muerte de más de 67 mil personas y más de 200 mil heridos desde que el ejército israelí intensificara su agresión en respuesta desproporcionada a la incursión de fuerzas de Hamás en territorio israelí el 7 de octubre de 2023.
Abdalah Samir, uno de los estudiantes, agradeció a Cuba por su apoyo incondicional a Palestina, pese a los desafíos históricos que ha enfrentado la isla, incluido el recrudecido bloqueo impuesto por Estados Unidos. “A pesar de nuestras propias tragedias, Palestina se une a Cuba, hombro con hombro, porque el ejemplo de Cuba es una esperanza para nuestro pueblo”, afirmó.
Asimismo, expresó solidaridad con el valiente pueblo de Venezuela, que sufre amenazas y agresiones por parte de Estados Unidos en su afán por apropiarse del petróleo y otros recursos naturales. También rindió homenaje a los activistas del mundo que desafían al sionismo, al fascismo y al imperialismo, y que arriesgan sus vidas para llevar ayuda a Gaza.
Citando al líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, recordó que “la unidad latinoamericana y mundial es la garantía de soberanía”. Y añadió: “Derrotar al sionismo es hacer justicia al pueblo palestino y liberar también al pueblo judío”.
“El pueblo lucha por la tierra, la justicia social, la dignidad humana y su propio destino. La voluntad de los pueblos es más fuerte que las armas letales”, enfatizó.
Razan Malah relató el trauma de la muerte de su hermana y el asedio del ejército israelí contra su familia. “Es el sacrificio, la valentía y la existencia de un pueblo palestino dispuesto a perderlo todo —incluso la vida— por defender lo que es justo”, dijo con voz entrecortada.
Por su parte, la pionera Sabrina Padín, estudiante de la escuela primaria Nicolás Estévez, del municipio capitalino de Plaza de la Revolución, se dirigió a sus “compañeros pioneros palestinos”, cuyas escuelas están en ruinas y cuyas familias se esconden para sobrevivir.
La pionera lamentó que muchos niños palestinos vivan hoy entre el estruendo de los drones y el estallido de las bombas.
Norma Goicochea, presidenta de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas, condenó enérgicamente “el genocidio y el exterminio que Israel comete contra el pueblo palestino”, rechazando la impunidad con que actúan las fuerzas ocupantes.
El segundo secretario de la Unión de Jóvenes Comunistas,Yaliel Cobo, denunció la “complicidad histórica de Estados Unidos, supuesto paladín de la democracia, que hoy no siente el más mínimo remordimiento por el genocidio en Gaza, donde han muerto más de 67 mil palestinos, en su mayoría mujeres y niños”.
Añadió que Washington intenta disfrazar sus intenciones colonizadoras con discursos hipócritas sobre derechos humanos. Cobo recordó también la histórica visita de Ernesto Che Guevara a Gaza el 18 de junio de 1959, quien encarnaba el espíritu de lucha por la libertad de los pueblos oprimidos. “Sean siempre capaces —dijo citando al Che— de ponerse del lado de los que sufren”.
Mientras tanto, se conoció hoy que el presidente palestino, Mahmoud Abbas, saludó la primera fase de un acuerdo destinado a poner fin a la agresión israelí contra Gaza. El pacto incluye el intercambio de prisioneros, una retirada parcial de las fuerzas israelíes y la entrada de ayuda humanitaria.
En un comunicado, Abbas expresó su esperanza de que estos esfuerzos constituyan un preludio para alcanzar una solución política permanente que conduzca al fin de la ocupación israelí y al establecimiento de un Estado palestino independiente, con las fronteras del 4 de junio de 1967. (Texto y fotos: PL)