Camagüey, transporte, ómnibus, bicitaxis, triciclos eléctricos

Respetar tarifas alternativas refleja compromiso y solidaridad (+ Fotos)


Camagüey es una ciudad con más de 300 mil habitantes y aunque no todos se desplazan al mismo tiempo, una buena parte de ellos para llegar a su centro laboral, planteles estudiantiles o viajar a un hospital para turnos médicos necesitan medios de transporte.

Esta metrópoli, situada a más de 500 kilómetros de la capital cubana, enfrenta retos significativos en cuanto a movilidad urbana, particularmente la escasez de ómnibus para el tránsito interno de sus residentes.

Para mitigar esta problemática, exacerbada por el riguroso bloqueo impuesto por Estados Unidos, la falta de repuestos y financiamiento, se ha recurrido a alternativas como carruajes tirados por animales, bicitaxis y, más recientemente, triciclos eléctricos.

Estos últimos cuentan con una tarifa oficial establecida por el Consejo de Gobierno Provincial y el Consejo de la Administración Municipal del Poder Popular.

A todas esas variables se suman los llamados trompos,   pequeños ómnibus Diana con recorridos preestablecidos y un precio asequible a los viajeros y la Operación Sensibilidad, surgida en el 2019.

En el horario de 6:30 a 8:30 de la mañana se integran a ese gesto solidario transporte estatal ligero de diferentes empresas  e instituciones, entre ellos del Partido Comunista, el Gobierno, el Ministerio del Interior y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.

Los corredores principales de la Operación Solidaridad incluyen Casino-Modelo, Calle Cuba-Rafelita, y Rafelita, Casino Campestre y Ferro-Ómnibus con destino a la Universidad de Camagüey Ignacio Agramonte Loynaz, entre otros.

A pesar de los acuerdos tarifarios vigentes, muchos operadores de coches de tracción animal y triciclos eléctricos en Camagüey ignoran las normativas establecidas, cobrando más de lo permitido.

En lugar de adherirse al precio estipulado de 20 pesos por tramo, algunos conductores de coches solicitan 50 pesos, mientras que los de triciclos eléctricos llegan a cobrar hasta 60 pesos.

Es razonable pensar que respetar las tarifas oficiales no solo es una cuestión de cumplimiento, sino también un acto de solidaridad hacia los ciudadanos, mantener los precios accesibles es fundamental para apoyar la economía local y el bienestar de la comunidad. (Enrique Atiénzar Rivero/Colaborador Radio Cadena Agramonte) (Fotos: Humberto Cid González/ Radio Cadena Agramonte)


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