
Para los camagüeyanos la entrada de la Caravana de la Libertad el 4 de enero de 1959 significó el inicio de una nueva era, la victoria de la Revolución cubana y el fin de un régimen que había sido considerado opresor.
La llegada de Fidel Castro y el ejército rebelde a Camagüey fue recibido con entusiasmo y esperanza por parte de la población, que veía en ellos a los defensores de sus derechos y aspiraciones.
Los camagüeyanos sienten un profundo respeto por aquellos que se unieron a la causa revolucionaria, muchos de los cuales eran oriundos de la región.
La Caravana no solo trajo consigo un cambio político, sino que también inspiró a las comunidades a involucrarse activamente en la construcción del futuro del país.
Cada aniversario es una oportunidad para recordar las historias personales y familiares ligadas a esos acontecimientos, creando un sentido colectivo de identidad.
Las celebraciones, que suelen incluir desfiles, discursos y actividades culturales, son momentos en los que se comparte el legado revolucionario y se renuevan los compromisos hacia los ideales por los cuales se luchó.
Celebrar un aniversario más de la entrada de la Caravana de la Libertad a Camagüey, es un momento significativo para los camagüeyanos, simboliza la llegada de la Revolución cubana a la ciudad y representa un hito en la historia del país. Para los agramontinos, esta celebración evoca sentimientos de orgullo y resistencia, así como un reconocimiento a los sacrificios realizados por aquellos que lucharon por la libertad y la justicia social.
Es una oportunidad para recordar y honrar a los héroes de la Revolución, reflexionar sobre los cambios que ha traído y cómo han influido en la vida cotidiana. Además, es una ocasión para fortalecer el sentido de comunidad y unidad entre los habitantes de Camagüey, celebrando su identidad e historia compartida. (Texto: Arleén Calvo Lacal) (Fotos: Humberto Cid González)












