La Habana, 4 may.- Los 900 delegados de 39 países que se reunieron en La Habana para el Encuentro Internacional de Solidaridad con Cuba, reafirmaron su compromiso con la lucha por la soberanía, la justicia social y la solidaridad entre pueblos para enfrentar el neofascismo. Inspirados por el legado de Fidel Castro, destacaron el papel del movimiento sindical en la defensa de la hermandad laboral y expresaron su apoyo al pueblo cubano frente al bloqueo económico de Estados Unidos.
Nosotros, los 900 delegados al Encuentro de Solidaridad Antifascista y Antimperialista, procedentes de 39 países, inspirados en la convicción martiana de que «Patria es humanidad», en el pensamiento y acción del líder histórico de la Revolución Cubana, el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y en la lucha inquebrantable de los pueblos y líderes antimperialistas en defensa de la soberanía y el derecho a construir un mundo democrático y sostenible y un estado socialista, basado en los principios de justicia y equidad social;
Convencidos de que ejercer la solidaridad entre los pueblos es el único modo de enfrentar el avance del neofascismo;
Conscientes de que el movimiento sindical internacional, desempeña un papel significativo en la defensa de la hermandad entre los trabajadores y sindicatos de todo el mundo;
Inspirados en la resiliencia del pueblo cubano, que enfrenta, desde hace más de seis décadas, un férreo bloqueo económico, comercial y financiero, impuesto por Estados Unidos , como principal herramienta del imperialismo para intentar doblegar el espíritu independentista, altruista, socialista e internacionalista de Cuba;
Reafirmamos nuestro compromiso con:
1. Denunciar en todos los espacios y por todos los medios posibles, el acto de genocidio que constituye el bloqueo económico, comercial y financiero; y su carácter extraterritorial, que afecta a terceros países, y exigir el fin incondicional de esta guerra económica que continúa siendo el principal obstáculo para el desarrollo de Cuba y que ha provocado, sobre todo en los últimos años con su recrudecimiento, el deterioro de servicios básicos como la salud, la alimentación, la educación, la electricidad, el transporte público, la producción de alimentos y medicinas, prestaciones que han estado al alcance de los cubanos y cubanas a partir de 1959.
2. Exigir que Cuba sea eliminada de la espuria lista de Estados que supuestamente patrocinan el Terrorismo. Divulgar el carácter disuasivo e intimidatorio de esta injusta medida que incrementa las carencias y limitaciones que ya provoca el bloqueo al pueblo cubano y castiga a personas y organizaciones que mantienen una relación legítima con Cuba. La única lista en la que Cuba debería aparecer es en la de estados patrocinadores de la paz y la solidaridad internacional.
3. Combatir las falsas narrativas sobre Cuba promovidas por los medios de comunicación hegemónicos, que silencian los logros sociales y los ejemplos de solidaridad que Cuba ofrece al mundo para tratar de justificar las medidas criminales de guerra económica que sufre el pueblo cubano. En particular, exigir el cese inmediato de la manipulación comunicacional y de las medidas contra las misiones médicas cubanas y los gobiernos de los países donde estas laboran. Rechazar la criminalización de la solidaridad de quienes salvan miles de vidas en situaciones de desastres naturales, epidemias y otras crisis en todos los continentes. Seguir reivindicando el acceso público a información precisa, imparcial y veraz sobre Cuba y su Revolución.
4. Reclamar el pago de una justa compensación económica por parte del Gobierno de Estados Unidos al pueblo cubano por los daños económicos y humanos debido a la práctica criminal del bloqueo y el terrorismo, que actualmente ascienden a más de 1,3 trillones de dólares.
5. Demandar la devolución del territorio ilegalmente ocupado por Estados Unidos en Guantánamo y utilizado como centro de detención y tortura. Asimismo, exigir que Estados Unidos asuma el costo de la remediación ambiental, la remoción de todas las minas terrestres de los terrenos que rodean la Bahía de Guantánamo y la retirada de todas sus instalaciones del territorio cubano.
6. Rechazar el doble rasero y la politización del tema de los Derechos Humanos y la democracia, el cual ha sido utilizado para subvertir a gobiernos democráticamente electos. Exigir el fin de los fondos de EE.UU. destinados a programas millonarios de injerencia, medios de prensa, organizaciones y plataformas digitales de comunicación que, con falsos pretextos y objetivos reales de dominación, atentan contra el ordenconstitucional de Cuba para intentar derrocar a la Revolución.
7. Fortalecer y ampliar el movimiento de solidaridad con Cuba en todas las regiones, promoviendo la participación amplia de todas las fuerzas, organizaciones y personas de bien que expresan una genuina simpatía hacia el Cuba.
8. Fomentar la solidaridad material mediante el envío de donaciones, la implementación de proyectos de cooperación y la participación en los eventos internacionales de solidaridad con Cuba.
9. Impulsar el movimiento de brigadas internacionales de solidaridad con Cuba y las visitas de grupos especializados. No existe mejor forma de conocer la realidad cubana que compartiendo con su pueblo, siendo testigos de su resistencia, su creatividad y su espíritu de lucha y de victoria.
10. Defender y difundir los ideales humanistas de la Revolución Cubana y el legado ético y político de su líder histórico, Fidel Castro Ruz, en el contexto del centenario por su natalicio, a conmemorarse en agosto de 2026.
Desde este Encuentro de Solidaridad Antifascista y Antimperialista nos pronunciamos por un NO a la guerra, a la hegemonía, a la injerencia. NO a las medidas coercitivas, a las agresiones, al levantamiento de muros y a los bloqueos.
Frente a la ofensiva imperialista y fascista, una sola voz unida y enérgica:
¡Cuba socialista tiene derecho a existir!
¡No más Bloqueo!
¡Viva el internacionaismo y la paz! (Texto y Foto: Cubadebate)