La Habana, 19 sep.- Surgió en 2005, y 20 años después todavía libra enardecidas batallas en favor de la vida. Lo fundó el Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz como gesto solidario luego del devastador paso del huracán Katrina por los estados del sur de los Estados Unidos, acción que el gobierno norteamericano rechazó.
El Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastre y Graves Epidemias Henry Reeve honra con su nombre a un joven estadounidense que se unió como soldado a los patriotas cubanos durante la guerra de independencia contra el colonialismo español.
Impuso la naturaleza que las brigadas médicas que lo integran enfrentaran su primer desafío en el propio año 2005, cuando las intensas lluvias provocaron súbitas inundaciones en Guatemala. Allí, el Henry Reeve asistió a cerca de medio millón de personas.
Humanismo y solidaridad
Desde su fundación el 19 de septiembre de 2005, el Contingente Henry Reeve ha predicado con los estandartes más elevados del humanismo y la solidaridad. Lo saben los habitantes de Islamabad, la capital de Pakistán, porque hasta allí llegaron los médicos cubanos cuando, hace 20 años, un devastador terremoto asoló esa nación.
El Henry Reeve también libró importante batallas en favor de la vida al contribuir significativamente a erradicar las epidemias de cólera en Haití y de ébola en África.
Su dosis más reciente de amor por la humanidad la inyectó durante la pandemia de Covid-19, una labor tan meritoria que propició su nominación al Premio Nobel de la Paz.
El Contingente Henry Reeve, que tiene como motores impulsores la profesionalidad y el altruismo, figura hoy como una luz para los pueblos del mundo. (Radio Reloj) (Foto: Tomada de Internet)