Por Rolando Sarmiento Ricart/Colaborador de Radio Cadena Agramonte.
Cuando el mandatario francés, Francois Hollande, chilló en Bruselas por las -según él - injustas y desproporcionadas sanciones que Estados Unidos anunciaba para el banco BNP-Paribas por violar el bloqueo impuesto por la Casa Blanca a Cuba, Irán y Sudán, pensé no solo en la lógica riposta gala, sino en la prepotente “justicia” norteamericana pagada para tratar de asfixiar y matar de hambre a los cubanos residentes en la Isla.
Una “justicia” que contra Cuba muestra descarnadamente ensañamiento político y acoso financiero, económico y comercial. En ambos planos de las ideas y la economía sobran los ejemplos de hostigamiento desmedido, de crueldad infrahumana, como los juicios amañados en la Florida para sancionar sin pruebas legales a Cinco patriotas que enfrentaron a terroristas confesos como Luis Posada Carriles, quien se pasea suelto y vociferando con sus alumnos nuevos proyectos con predilectas bombas-reloj de explosivo C-4, en tanto cumplen injustas y desproporcionados castigos Gerardo Hernández (dos cadenas perpetuas más 15 años), Antonio Guerrero y Ramón Labañino.
El grupo lo completan René González y Fernando González, quienes retornaron a Cuba luego de cumplir la totalidad de sus condenas.
“Injustas” y “desproporcionadas” considera las sanciones el Presidente de Francia, uno de los países aliados de USA en Europa, y advierte a su homólogo Barack Obama que la multa de 10 mil millones de dólares, más la suspensión de las operaciones del banco francés en Estados Unidos, puede incluso “desestabilizar las relaciones bilaterales”.
La “justicia” unilateral del Imperio hegemónico es así: le pone el pie encima hasta a sus propios “socios” y, aunque salten de dolor financiero, ni perdón les ofrece; y el bloqueo contra Cuba y otras naciones democráticas -que a nadie le quepa duda- ya es un cuantioso negocio más para el Departamento del Tesoro de Estados Unidos. (Foto: Internet.)