
México, 6 nov.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, presentó este miércoles una denuncia formal ante la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México contra el hombre que la acosó en vía pública el día anterior, durante un recorrido a pie entre la Secretaría de Educación Pública y la sede de la Reunión Nacional de Universidades e Instituciones Públicas de Educación Superior.
“Si esto le hacen a la Presidenta, ¿qué va a pasar con todas las jóvenes mujeres en nuestro país?”, cuestionó Sheinbaum al anunciar la querella. Subrayó que el acoso es un delito penal en la capital y que su decisión busca enviar un mensaje claro: “Nuestro espacio personal nadie lo puede vulnerar. Ningún hombre tiene derecho a hacerlo”.
La mandataria relató que el agresor, identificado como Uriel Rivera y actualmente detenido, se acercó en estado de ebriedad mientras saludaba a ciudadanos en la calle. Aunque no percibió de inmediato la agresión, los videos posteriores evidenciaron el episodio.
“Lo viví como mujer, pero lo vivimos todas las mujeres en nuestro país. Lo he vivido antes, cuando era estudiante, como joven. Viví acoso en el transporte a los 12 años”, compartió.
Sheinbaum reafirmó que no modificará su esquema de seguridad, pues desea mantenerse cercana a la ciudadanía. Además, instruyó a la secretaria de la Mujer, Citlalli Hernández, a lanzar una campaña nacional para visibilizar el acoso y revisar los marcos legales estatales, con el objetivo de que este tipo de violencia sea sancionada penalmente en todo el país.
La secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, condenó el hecho como “reprobable” y expresó: “Ninguna mujer que transita el espacio público debe vivir con miedo; todas tenemos derecho a caminar libres y seguras”.
Por su parte, Rocío Bárcena, subsecretaria de Construcción de Paz, denunció el manejo mediático del caso como una forma de revictimización: “¡Cero tolerancia! ¡Basta de politizar la agresión!”.
La ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Loretta Ortiz Ahlf, calificó el incidente como un acto de violencia que debe ser enfrentado por el Estado y la sociedad: “Callarlo es retroceder. Denunciarlo y enfrentarlo es un deber”.
También la gobernadora de Morelos, Margarita González, se sumó al rechazo: “Ni una mujer acosada en las calles ni en ningún espacio”.
El partido denunció además la revictimización mediática como una forma de violencia política de género: “Utilizar imágenes de una agresión para atacar o ridiculizar a una mujer constituye una muestra del profundo desprecio que ciertos sectores aún tienen hacia las mujeres, sobre todo cuando ejercen el poder”.
Desde la Cámara de Diputados, integrantes del grupo parlamentario de Morena exigieron castigo para quienes han promovido actos de violencia digital contra la presidenta.
Anais Burgos, presidenta de la Comisión de Igualdad de Género, enfatizó: “Querer invisibilizar esta violencia que vive a diario la mujer que manda en este país es un acto de cobardía”.
Las legisladoras subrayaron que el acoso callejero también es violencia de género y que, al dirigirse a una figura pública como la presidenta, el mensaje social es doblemente grave: “Ni siquiera en el cargo más alto estás a salvo”.
Lo sucedido ayer a la jefa del Ejecutivo, envía un “mensaje claro y aterrador: ‘ni siquiera en el cargo más alto, estás a salvo. Ni siquiera siendo la presidenta escaparás de ser reducida a tu cuerpo, de ser objetivizada y de ser violentada’. ¿Qué mensaje le estamos dando a los niños y los jóvenes de este país? ¿Qué les estamos diciendo cuando permitimos que esto suceda sin consecuencias contundentes?”, preguntó.
Luego de recordar que el marco legal del país ya contempla sanciones contra los actos de acoso sexual, entre ellas la Ley Olimpia, Burgos denunció la existencia de “cientos y miles de cuentas automatizadas, de bots, sin rostro, pero con intención clara. Atacan sistemáticamente el quehacer político que ejerce con dignidad nuestra primera Presidenta de la República”.
Para la legisladora, “esta es violencia digital y no es juego. No es crítica, no es libertad de expresión: es acoso, es violencia de género amplificada por la tecnología. Y ahora, además de esta agresión cotidiana en el mundo virtual, hemos sido testigos de esta agresión física”.
Por su parte, la vicecoordinadora de la bancada, Dolores Padierna Luna, recalcó que lo vivido ayer por Sheinbaum es un acto de acoso. “No es un hecho menor, es reflejo del machismo que aún pretende imponerse sobre la dignidad de las mujeres, incluso cuando se trata de la Presidenta de la República”, expuso.
Frente a ello, dijo, “respondemos con unidad, sororidad y firmeza. Tocar a una es tocar a todas, y todas estamos con la Presidenta, por su integridad, liderazgo y valentía. Exigimos respeto, igualdad y una vida libre de violencias”. (Texto y Foto: Cubadebate)