
Gaza, 16 nov.- La crisis humanitaria en la Franja de Gaza se deteriora de manera alarmante este sábado 15 de noviembre, agravada por las fuertes lluvias y el descenso de las temperaturas, que han golpeado con dureza a cientos de miles de refugiados que sobreviven en tiendas de campaña improvisadas.
Las intensas precipitaciones, consecuencia de un sistema de baja presión que afecta a la región, han provocado la inundación de numerosas tiendas y campamentos en la Gobernación de Gaza, incluyendo áreas como Al-Zaytoun y el campo de refugiados de Shati, elevando el nivel de sufrimiento de una población ya devastada por la ofensiva israelí.
La emergencia climática agrava la ya insostenible situación en el enclave. La Defensa Civil de Gaza informó haber recibido múltiples llamadas de auxilio de familias en diversas zonas, no solo en el norte, sino también en el centro de la Franja, afectando especialmente a la ciudad de Deir al-Balah y los campamentos de refugiados de Al-Bureij y Nuseirat.
La Oficina de Medios de Prensa del Gobierno del territorio hizo un llamado desesperado al mundo, señalando que con la llegada del invierno “el sufrimiento de los ciudadanos aumenta y la tragedia humanitaria se agrava”, urgiendo la necesidad de al menos 250 mil tiendas de campaña para proporcionar un refugio mínimo.
Paralelamente a la emergencia por el temporal, las violaciones al acuerdo de alto el fuego por parte de las fuerzas israelíes persisten. Fuentes locales reportaron este sábado que la artillería israelí bombardeó la parte oriental de la ciudad de Gaza, apuntando a las afueras del barrio de Shuja’iyya, aunque sin reportes iniciales de heridos. Incidentes similares incluyen disparos de drones en el campo de refugiados de Jabalia y el fuego de buques de guerra hacia la costa de Rafah.
Desde que el acuerdo de cese al fuego entró en vigor el 11 de octubre, las cifras oficiales palestinas documentan decenas de violaciones por parte de las fuerzas israelíes, resultando en la muerte de 261 palestinos y dejando heridas a otras 632 personas. A esto se suma la lenta y dolorosa recuperación de los cuerpos de 533 palestinos de debajo de los escombros. La ofensiva que comenzó el 7 de octubre de 2023 ha dejado un saldo catastrófico de al menos 69 187 palestinos muertos y 170 703 heridos, la gran mayoría niños y mujeres.
El Ejecutivo del territorio es enfático al criticar el silencio internacional ante la dilación de Israel en el cumplimiento de sus obligaciones. Subrayaron que la tragedia humanitaria se esperaba mitigar con el alto al fuego, pero el sufrimiento continúa porque Israel no permite la entrada suficiente de ayuda vital: alimentos, medicinas, materiales de construcción y suministros para refugio. El pueblo palestino ha vivido dos años de guerra genocida y una privación humana sin precedentes que incluye la negación de agua, alimentos y atención médica.
La Defensa Civil solicitó directamente a los países patrocinadores del acuerdo de alto al fuego, exigiendo que presten “atención al sufrimiento de cerca de medio millón de familias desplazadas por la agresión israelí”. La doble presión del clima y la agresión militar transforman Gaza en un infierno de supervivencia diaria, haciendo un llamado a la conciencia global para que se rompa el silencio y se garantice el acceso inmediato y sin restricciones de la ayuda que puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte para miles de personas. (Texto y Foto: Cubadebate)