
Brasil, 13 dic.- El ministro de Relaciones Exteriores de Brasil, Mauro Vieira, lideró este viernes 12 de diciembre, en Brasilia la reunión de cierre de la presidencia rotatoria del bloque BRICS, compuesto por 11 naciones. En su intervención, el canciller destacó que la cooperación dentro del grupo transciende las fronteras iniciales que se había fijado, extendiendo su influencia más allá de las tradicionales esferas política y financiera.
Vieira afirmó que el ejercicio de la presidencia brasileña es el resultado de un «esfuerzo de todo el Gobierno», lo que refleja no solo la amplitud de la agenda que maneja actualmente el BRICS, sino también la profundidad con la que la cooperación se expandió en nuevas áreas. De esta manera, el bloque se consolida como una plataforma de desarrollo integral, según el diplomático.
De cara a los desafíos futuros, el ministro brasileño enfatizó la necesidad apremiante de que el grupo se acerque a las realidades cotidianas de sus ciudadanos y que sus acciones se traduzcan en resultados concretos. La aspiración es que el BRICS sea percibido como algo más que un foro de diálogo intergubernamental.
En este sentido, Vieira subrayó que el bloque «debe ser visto no solo como un foro de diálogo entre Gobiernos, sino también como una plataforma capaz de generar beneficios tangibles para nuestros pueblos». Esta declaración marca una pauta hacia una agenda más orientada a la vida práctica y al bienestar social en sus países miembros.
Este pasado jueves 11 de diciembre marcó el inicio de la última reunión de el embajador Mauricio Lyrio, el «sherpa» de BRICS bajo la presidencia de Brasil. El embajador Mauricio Lyrio, de Brasil ante el BRICS, realizó un balance positivo de la gestión, resaltando el compromiso del país con la defensa del multilateralismo en un escenario mundial de alta complejidad. Lyrio recordó que el contexto internacional actual está «marcado por la desconfianza en varios frentes», lo que ejerció una presión adicional sobre la acción colectiva del grupo.
El diplomático también destacó que la declaración final de líderes, emitida en la cumbre de julio celebrada en Río de Janeiro, fue un documento clave. Dicha declaración condenó conflictos bélicos, abogó por una gobernanza global más equitativa e inclusiva, y reforzó la necesidad de impulsar la reforma del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
A lo largo de la presidencia brasileña de los BRICS, se realizaron 220 videoconferencias, 62 reuniones técnicas, 21 reuniones ministeriales, 4 reuniones de «sherpas», la cumbre de líderes en Río y una cumbre virtual. (Texto y Foto: Cubasí)