
La Habana, 23 dic.- La Oficina de Regulación y Seguridad Ambiental (ORSA) de Cuba lleva a cabo un proyecto para la creación de capacidades en torno a la identificación y detección de organismos genéticamente modificados (OGM).
La iniciativa cuenta con el respaldo financiero del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma), a través del Fondo Mundial para el Medio Ambiente, y contempla dos laboratorios con ese propósito, así como herramientas, guías, protocolos y procedimientos sobre detección de OGM desarrollados, armonizados y adaptados a la realidad y las necesidades de Cuba.
Según dieron a conocer directivos de ORSA, en conferencia de prensa en La Habana, dicha creación de capacidades adicionales en bioseguridad busca la completa implementación en Cuba del Protocolo de Cartagena sobre Seguridad de la Biotecnología.
El referido protocolo tiene por objeto contribuir a garantizar un nivel adecuado de protección en la esfera de la transferencia, manipulación y empleo seguro de los organismos vivos modificados resultantes de la biotecnología, que puedan tener efectos adversos en la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica, toma en cuenta los riesgos para la salud humana y se centra en los movimientos transfronterizos.
El proyecto prevé intercambios con otros laboratorios de detección de la región, al formar parte de la Red Lationamericana de Laboratorios de Detección (RLAC-OGM), de acuerdo con el anuncio de directivos de ORSA.
Está además en implementación un sistema para el monitoreo y la vigilancia de posibles efectos adversos en el medioambiente, lo cual permitirá a la autoridad nacional conducir el proceso de toma de decisiones en las liberaciones de esos cultivos.
Los dos nuevos laboratorios, ubicados en las provincias de Ciego de Ávila y Villa Clara, permitirán a la autoridad nacional regulatoria poder certificar las semillas que son importadas por el país para la producción de maíz y soya como alimento animal, explicó a Prensa Latina el director general de ORSA, Antonio Casanova.
De acuerdo con el funcionario, dicha capacidad analítica -además de referencia para Cuba- pudiera convertirse en un servicio exportable para el país caribeño, si se concluye con la acreditación del órgano nacional.
Por otro lado, le da la posibilidad a la Mayor de las Antillas de proteger determinados rubros exportables como la miel de abejas, al certificar mediante ensayos la presencia o no de restos de OGM.
ORSA, perteneciente al Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente (Citma), es la autoridad nacional encargada de regular y controlar el cumplimiento de las leyes y disposiciones jurídicas y técnicas en materia de protección del medio ambiente.
También, vela por la seguridad química, biológica, nuclear, radiológica y la protección del medio ambiente contra la contaminación, considerando las prioridades del desarrollo económico y social de Cuba.
Dicha entidad del Citma trata el control y protección de especies significativas de la diversidad biológica, el comercio internacional de especies amenazadas de la fauna y la flora silvestre, recursos genéticos, productos químicos de uso industrial, desechos peligrosos y transferencia de tecnología, además de velar por el cumplimiento de los compromisos internacionales contraídos por el Estado cubano en esas esferas. (Texto y foto: PL)