Por Diosmel Galano Oliver/Radio Camagüey.
Camagüey, 13 ene.- Desde el mismo inicio de la Revolución los enemigos del sistema se empeñaron en poner todos los obstáculos posibles para revertir el estado de justicia social y democracia conquistado, y entre esos impedimentos sobresale el bloqueo económico, comercial y financiero de los Estados Unidos contra Cuba por su incidencia directa en todos los sectores de la sociedad.
De manera particular el área de la salud sufre las limitaciones ocasionadas por la unilateral e inhumana política, que demanda de mayores esfuerzos del Gobierno de la Isla y de los profesionales del sector para garantizar servicios médicos de calidad y con ellos la vida del pueblo.
A LA SALUD CAMAGÜEYANA NO LA FRENA NINGUNA MEDIDA
El Hospital Oncológico María Curie, de Camagüey, brinda desde hace varios años servicios médicos indispensables para los habitantes de la provincia y de los vecinos territorios de Ciego de Ávila y Las Tunas.
En esa institución todo el colectivo se afana cada día para minimizar el impacto del bloqueo estadounidense a la mayor de las Antillas, que en centros como este se experimentan todas las jornadas, precisa la Doctora Elsi González Vidal, subdirectora del Hospital Oncológico.
“Las limitaciones en la asistencia médica que brindamos a la población se pueden dividir en afectaciones tanto en el diagnóstico como en el tratamiento de los pacientes. En la primera vemos esas dificultades en la falta de piezas de repuesto para los equipos médicos, por ejemplo, el destinado a las mamografías y a la cámara gamma.
En cuanto al tratamiento están enfocados mayormente en la falta de medicamentos e insumos médicos y tiene que ver con la administración de la poliquimioterapia que es una de las vertientes de la atención oncológica. Existen medicamentos de alto costo que debido al bloqueo debemos buscar en lugares tan alejados como la India; también nos falta la gasa que se emplea en la confirmación histopatológica requerida por los pacientes”.
Ante tales restricciones el personal clínico -conformado en la actualidad por 75 médicos, 66 enfermeros y 68 tecnólogos- encuentra alternativas para la atención de las diferentes patologías.
“Existen alternativas en la institución médica como la adecuación de los protocolos de trabajo, en el Servicio de Mastología de Mama se realizan las pruebas diagnóstico a través de la ecografía y se logra un resultado preciso. El bloqueo es una realidad para la salud, pero -a pesar de todo- las alternativas adoptadas en el centro permiten mantener el control en la morbilidad y mortalidad asociadas al cáncer”, precisó la doctora González Vidal, quien resaltó el compromiso del colectivo con el bienestar y la calidad de vida de los pacientes, un empeño que no puede frenar ninguna medida extraterritorial.
LOS CIENTÍFICOS CUBANOS NOS HAN DADO MAYOR SOBERANÍA
La doctora Sindy Olivera Batista, asume por estas jornadas la jefatura del Servicio de Poliquimioterapia del Hospital Oncológico de Camagüey, allí se enfrenta desde hace cuatro años a los efectos del bloqueo económico, comercial y financiero de Estados Unidos evidente en los servicios médicos.
SIN BLOQUEO SERÍA MUCHO MÁS EFECTIVA LA ATENCIÓN
En el Hospital Oncológico María Curie, de Camagüey, los efectos del bloqueo del gobierno estadounidense contra Cuba son visibles, al limitarse el acceso a insumos y tecnologías.
En el Servicio de Radioterapia de la institución asistencial, cuenta el doctor René Madruga Torres, las privaciones no impiden ofrecer una atención de calidad.
“En este departamento hay instalados cuatro equipos de alta tecnología y se hace muy difícil adquirir las piezas de repuesto debido al bloqueo. Solo mediante el esmerado trabajo de los electromédicos se mantienen en funcionamiento.
También para cumplir la braquiterapia presentamos dificultades debido a la escasez de insumos como las sondas vesicales, la gasa, el algodón, los preservativos, las cánulas plásticas, que no están en el número indicado, pero los servicios se mantienen porque se encuentran alternativas para tener esos recursos, aunque sea en pequeñas cantidades”.
¿Conocen los agramontinos las afectaciones que causa el bloqueo en el servicio?
“Ellos lo saben desde que entran, el bloqueo limita las condiciones de cualquier lugar de salud y cuando empiezan a relacionarse más con el equipo de trabajo lo constatan mejor y a la vez transmiten una felicitación por la forma en la que en medio de esas carencias no se detiene la atención médica”.
Y agrega el Especialista en Primer Grado en Oncología y Radioterapia: “El médico se forma por vocación, lo principal para nosotros es la atención al paciente, es la prioridad y la razón de ser; por eso ante cualquier obstáculo buscamos alternativas para garantizar el servicio con la calidad requerida. Sin bloqueo sería mucho más efectiva la labor, pero lo que hacemos no ha dejado de tener calidad”.
El doctor René Madruga Torres es de esos miles de profesionales de la salud en Cuba que multiplica los esfuerzos para minimizar los efectos de una política tan inhumana como esta.
Desde su puesto en el Hospital Oncológico agramontino ayuda a cientos de familias a tener mayor calidad de vida; una misión que ninguna medida puede limitar. (Fotos: del autor)
