Con la esperanza de que sus cultivos se beneficien de los primeros aguaceros de la primavera, Eduardo Espinoza González, conocido como El Maestro, se dedica con fervor a trabajar en su patio. En la calle 9 de Noviembre, entre G y H, en el municipio de Santa Cruz del Sur, ha redoblado sus esfuerzos para cuidar de sus plantas, aguardando con entusiasmo la llegada de la lluvia.
"Riego mis semilleros de cilantro, aguacate y mango con agua potable para asegurar su crecimiento. Después los trasplantaré a otras áreas. En cuanto al resto de mis cultivos, confío en su resistencia; son productivos. Las primeras gotas de lluvia serán una bendición para todos los productores como yo", comenta con optimismo.
Eduardo, quien ganó el apodo de El Maestro por su labor como docente en su juventud, trabajó como camaronicultor en la Unidad Empresarial de Base (UEB) CULTISUR hasta su jubilación en 2017. Su conexión con la tierra es profunda, y dedica su tiempo y esfuerzo a cultivarla.
"Produzco plátano de diversas variedades, ají y una variedad de frutales como mango, pera, cereza y grocella. De todo lo que cosecho se benefician mi familia y mis vecinos. Compartir mi producción me hace sentir mejor persona, ya que sé que contribuyo al bienestar de los demás", afirma con satisfacción.
En el fondo de su terreno hay un espacio vacío que planea sembrar con boniato y yuca tan pronto como comience la primavera. "Ambos tubérculos crecen muy bien aquí, y tengo experiencia de cosechas anteriores que me dan la seguridad de que serán exitosas", asegura, sonriendo.
El santacruceño evoca las palabras del Comandante en Jefe Fidel Castro, quien instó a la población a cultivar la tierra. Para Eduardo, esta exhortación no es solo una frase; es un compromiso que lo motiva a seguir trabajando con dedicación. Su esfuerzo constante le garantiza cosechas a lo largo del año. (Texto y foto: Raúl Reyes Rodríguez/Radio Santa Cruz)