Ciudad de México, 4 jul.- La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, manifestó hoy su desacuerdo con elementos del plan fiscal aprobado en Estados Unidos dirigidos a reforzar las deportaciones y la construcción de cárceles como la denominada Alcatraz Caimán.
“No estamos de acuerdo. La migración debe de atenderse en el fondo, con cooperación para el desarrollo”, dijo la jefa del Ejecutivo ante una pregunta sobre la iniciativa avalada por legisladores a propuesta del mandatario Donald Trump.
Durante su habitual conferencia de prensa, la dignataria refirió que por la frontera entre ambas naciones los encuentros con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas del país norteño totalizaron ayer 220, muy pocos en comparación con los miles que llegaban hace algunos años.
“Realmente es muy poca ya la migración que está entrando. La mayoría de las personas migrantes que están en Estados Unidos –no solo mexicanos, de distintos países de América Latina y el Caribe, pero las y los mexicanos tienen muchos años trabajando-” en ese país, aseveró.
La gobernante reiteró que se trata de gente de bien que aporta mucho a la economía de México al enviar remesas a sus familias, pero contribuye más a la del vecino territorio del norte.
“Además de que no estamos de acuerdo con los actos discriminatorios y persecutorios de los migrantes y este trato como si fueran criminales, le va a hacer mucho daño a la economía de Estados Unidos”, insistió.
Recordó que el propio Trump tuvo que decir hace unas semanas que en el caso del campo, los hoteles y otras actividades se suspendieran las detenciones porque había recibido llamadas de empresarios debido a las afectaciones enormes en los sectores mencionados.
“Entonces, no es bueno desde ningún punto de vista, ni humanista ni desde la perspectiva económica. Nosotros siempre vamos a defender a nuestros hermanos migrantes, siempre, y estamos fortaleciendo el (programa) México te abraza, para cuando lleguen a nuestro país”, agregó.
De acuerdo con la mandataria, ya pocas personas deportadas arriban por la frontera norte y la mayoría son enviados en aviones a Tapachula (Chiapas) y Villahermosa (Tabasco), de modo que las autoridades de México están fortaleciendo la atención en esos dos lugares del sur del país. (Fuente: Prensa Latina)