
La Habana, 20 nov.- La economía cubana arrastra desequilibrios acumulados a lo largo del tiempo, los cuales afectan sectores claves como la producción, el abastecimiento energético, la logística interna, el funcionamiento del sistema financiero y el acceso a las divisas, y a esto se suman errores internos que agravan aún más las dificultades.
Sin embargo, el factor más determinante en este panorama sigue siendo el impacto prolongado del bloqueo estadounidense, que restringe los ingresos externos, eleva los costos financieros, limita las posibilidades del pago internacional y ejerce presión sobre el país en múltiples frentes.
En ese entorno adverso, la plataforma El Toque amplifica cualquier perturbación económica e incrementa la dependencia del mercado informal, el cual, a su vez, reproduce distorsiones y perjudican directamente a la población.
De acuerdo con la segunda edición del programa televisivo Razones de Cuba: Denuncia del pueblo de Cuba contra El Toque, las investigaciones revelan que este medio surgió bajo el amparo de la emisora holandesa Radio Nederland –inicialmente creada con fines de subversión contra la entonces Unión Soviética–, la cual recibía financiamiento del gobierno estadounidense para organizar y ejecutar una escalada de acciones terroristas contra la Isla.
Según el periodista Raúl Antonio Capote, Radio Nederland tuvo como eje fundamental la formación de un liderazgo contracultural de nuevo tipo, para la cual se impartieron cursos de formación de líderes en Europa; porque necesitaban periodistas graduados en las universidades cubanas, personas que pudieran identificarse con la población y que estuvieran capacitadas para ejercer el oficio.
Así, en abril de 2017, y bajo la dirección de José Jasán Nieves Cárdenas, se constituyó la Fundación Colectivo Más Voces, formalmente presentada como una fundación pública sin fines de lucro, pero que, en la práctica, recibía fondos de las estructuras del Gobierno de los Estados Unidos, del Departamento de Estado, de la Agencia para el Desarrollo Internacional (Usaid) y de la Fundación Nacional para la Democracia (NED), con la finalidad de trabajar contra el sistema socialista cubano, explicó el coronel Francisco Estrada Portales, jefe de departamento del Órgano de Instrucción de los Delitos contra la Seguridad del Estado, del Ministerio del Interior (Minint).
El proceso investigativo, añadió, también demuestra que, tras la acreditación de la Fundación y la creación de la empresa Media Plux Experience, por parte de Nieves Cárdenas, comenzaron a propagarse actividades abiertamente alineadas con los intereses de los financistas, porque al inicio poseía cierto enmascaramiento.
SABOTAJE ECONÓMICO
El Gobierno de los Estados Unidos paga salarios con el propósito de minar la paz interna en Cuba, y eso constituye un delito, una violación de las leyes.
El actual director de El Toque, Nieves Cárdenas, reconoce ser un asalariado con el fin expreso de destruir la Revolución Cubana. Estamos en presencia de una persona que comete, impúdicamente, actos que podrían clasificar dentro de varias tipicidades delictivas recogidas en nuestras leyes, con el agravante de que lo está haciendo contra su país de nacimiento y por dinero. Está cometiendo sabotaje económico, actuando agresivamente contra el pueblo, puntualizó Estrada Portales.
En ese contexto, se reconoce, de igual forma, que Nieves Cárdenas ha realizado operaciones ilegales dentro de la Mayor de las Antillas, con el dinero asignado.
Un ejemplo concreto es Xavier Billingsley, quien fuera vicejefe de la sección de Relaciones Públicas de la Embajada de Estados Unidos en Cuba, cuando ofreció dinero a ciudadanos cubanos para que presentaran proyectos de subversión contra el país, con pagos canalizados a través de El Toque.
¿PLATAFORMA INDEPENDIENTE?
El Toque, la misma plataforma que impone tasas de cambio informales y se ha convertido en un instrumento de manipulación, nunca será alternativa de periodismo independiente.
De acuerdo con el jefe de departamento del órgano de instrucción de los Delitos contra la Seguridad del Estado del Minint, actualmente avanza una investigación penal que individualiza las actividades delictivas cometidas por sus integrantes.
Hasta este momento, agregó, existen 18 directivos implicados, radicados en diferentes países, así como un grupo de colaboradores.
El Toque se investiga como organización de las entidades que utiliza para su actividad, y por su vinculación con la guerra no convencional contra Cuba.
Además, los expertos están analizando las diversas formas en que manipula la tasa de cambio, falsea los datos que publica y altera la información recibida para ajustar diariamente una tasa ilegal.
Toda esa supuesta transparencia es una farsa. Hacen trampa con los datos para legitimar una cotización que afecta directamente a la economía nacional y al bienestar del pueblo, concluyó. (Texto y foto: Granma Digital)