Kiev, 30 jun.- Escuadrones neonazis de Sector Derecho agrupados en el batallón Donbás exigieron hoy el fin del alto el fuego y una mayor represión en el sureste de Ucrania durante una manifestación frente a la oficina del presidente, Pioter Poroshenko.
Simón Semetchenko, jefe de esa falange creada tras el golpe de Estado del 22 de febrero, demandó se declare la ley marcial y que el batallón Donbás y otras unidades paramilitares movilizadas en la operación punitiva sean autorizadas "a tomar medidas para eliminar" a quienes denominó terroristas, según la agencia UNN.
Reconoció Semetchko que en la represión del Ejército, fuerzas de seguridad y los grupos neonazis movilizados por los partidos Sector Derecho y Svoboda se registraron ya tres veces más víctimas que en las protestas que derivaron en el derrocamiento del presidente Víktor Yanukóvich.
Los neofascistas actuaron como tropa de choque en las acciones antigubernamentales de enero y febrero, ocuparon sedes institucionales, saquearon los arsenales y finalmente derrocaron a Yanukóvich tras la firma de un acuerdo incumplido por la oposición y los garantes europeos.
Poroshenko prorrogó el pasado viernes por 72 horas más el cese del fuego de una semana ordenado el 20 de junio a todas las fuerzas represivas que utilizan aviación, blindados, lanzamisiles múltiples, artillería y hasta bombas prohibidas por convenciones internacionales.
Sin embargo, elementos extremistas partidarios de barrer a la población rusoparlante del sureste continuaron los bombardeos en algunas zonas, según denuncias de las milicias de las autoproclamadas Repúblicas de Donetsk y Lugansk.
Los rebeldes se comprometieron a respetar la tregua, pero portavoces de las tropas represoras los acusan de haberla roto también en múltiples ocasiones, informó el canal ucraniano de televisión 24.
Este sábado en la sesión de la Asamblea Parlamentaria de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), el presidente de la Duma estatal rusa, Serguei Narishkin, denunció que en Ucrania "hay señales inequívocas de nazismo".
Advirtió Narishkin que los partidos Sector Derecho y Svoboda son grupos profascistas que se inspiran en el aliado de Hítler Stepan Bandera.
En Moscú, la cancillería rusa denunció que otra vez el Ejército ucraniano bombardeó un puesto de control fronterizo en el que había refugiados procedentes de las zonas habitadas por población mayoritariamente rusoparlante.
La diplomacia rusa reiteradamente ha denunciado que Kiev lleva a cabo a sangre y fuego una limpieza étnica en esos territorios, donde la ONU estimó en 110 mil el número de desplazados hacia zonas de Rusia, según Radio Libertad.
Un comunicado emitido hoy por el Servicio Estatal de Emergencias de Ucrania, en tanto, cifró en 25 mil las personas que ha evacuado hacia otras regiones desde los territorios sometidos a la devastación por los bombardeos.
El líder de la autoproclamada República Popular de Lugansk, Valeri Bolotov, denunció que los gobernantes ucranianos tienen planes de trasladar hacia las regiones surorientales a habitantes del occidente del país, partidarios de la ideología ultranacionalista y de los banderistas. (PL).