
La Habana, 24 nov.- El Instituto Cubano de la Música (ICM) lamentó el fallecimiento hoy en esta capital del maestro y notable violinista cubano, Enrique Álvarez.
Compositor, arreglista y creador en 1992 de la Orquesta Charanga Latina, el artista nació en la oriental provincia de Camagüey el 10 de septiembre de 1952.
Realizó sus estudios en la Escuela Nacional de Arte, con la profesora francesa Marivonne Drobahce, graduándose de Viola, informó el ICM en nota de prensa.
Su prestigiosa carrera artística incluye actuaciones como primer violín de la Orquesta Sinfónica Nacional, la Orquesta Sinfónica de Camagüey, colaboraciones con las orquestas de Elio Revé y Richard Egües; la Charanga de Guillermo Rubalcaba y las orquestas Maravilla de Florida y América.
Indica el texto que además de formar parte de una familia de grandes y prestigiosos músicos, su padre Nené Álvarez y su hermano, Adalberto Álvarez, Enrique fue un profesional a toda prueba que dejó su impronta en sus hijos y en las nuevas generaciones de violinistas cubanos.
Desde que decidió crear su propia orquesta, Charanga Latina, además de prestigiar su instrumento dentro de la música popular cubana, ocupó los primeros lugares de aceptación popular con sus temas, que hicieron y hacen bailar a varias generaciones de cubanos.
Premios y giras nacionales e internacionales, amplia discografía, popularidad, reconocimiento de los músicos cubanos y de otras latitudes, a los que se suma la admiración y respeto de su pueblo, avalan su meritoria carrera artística y profesional del creador.
Destaca el Instituto Cubano de la Música que Enrique Álvarez fue un fiel exponente de la música cubana, cuya entrega apasionada al arte de los sonidos, le hicieron ocupar un lugar meritorio dentro la historia musical y la cultura cubanas.
Pertenecía al catálogo de excelencia de la Agencia de Representaciones Artísticas Clave Cubana de Artex y era miembro de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba. (Fuente: Prensa Latina) (Foto: Internet)